Mónica Elizabeth Esparza Castro, encarcelada, torturada y abusada en el 2013 por parte de elementos de la Policía de Torreón, denunció que la violencia en su contra continúa a pesar de haber sido absuelta hace cuatro años.
En rueda de prensa, acompañada de la colectiva Activistas Feministas de la Laguna, y de su madre Martha Castro, señalaron que hace unos días, custodios de la corporación se presentaron en su domicilio tras afirmar que tenían una denuncia de carácter anónima por supuesta violencia infantil.
“Antier se acaba de presentar de nuevamente la Policía Municipal ahora con supuestas quejas anónimas donde dicen que había maltrato de niños en esa casa pero constantemente así ha sido, por una razón o por otra ellos tienen pretextos para llegar aún nosotros teniendo desde hace tres años, una restricción que no se pueden acercar, no pueden llegar y aún así lo hacen”
La activista Ariadne Lamont, señaló que es frecuente la forma que tienen las policías de las diferentes corporaciones en ir a perturbar su vida familiar.
“Van a la casa a veces, se meten a la fuerza, golpean a la familia, hemos hablado con todas las autoridades competentes y no ha habido una sola persona en el funcionariado que le interese el derecho que tienen estas mujeres y su familia de vivir una vida libre de violencia”
Señalaron que actualmente cuentan con 10 carpetas abiertas sin que a la fecha se tengan resultados.
“Quiero destacar mucho la que hice el 25 de mayo del 2022 en Saltillo, el Grupo de Reacción Laguna se metió hasta la casa, golpeó y torturó a mis hijos dentro de la casa”
A pesar de contar con recomendaciones hechas por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (15/ 2016) y pronunciamientos por parte de instituciones internacionales, donde se exige la reparación del daño, se continúa sin respuesta.
“Hemos enfrentado diferentes escenarios dentro del domicilio de mi mamá ya que diferentes corporaciones han ido, yo sí le hago un comunicado al gobernador para que ya no molesten a mi familia”
Mónica fue detenida el 12 de febrero de 2013 por 4 hombres y 1 mujer que tripulaban una patrulla de la policía municipal de Torreón mientras viajaba, con su pareja y su hermano, a bordo de una camioneta propiedad de su padre.
Estas personas les hicieron bajar del vehículo, les pidieron identificaciones y detuvieron, inicialmente, al esposo y al hermano de Mónica, mientras que ella fue sujeta de una revisión.
La policía los llevó a la Dirección de Seguridad Pública de Torreón, donde un oficial que empezó a abofetear a Mónica y le tapó el rostro con su propia ropa. Acto seguido, y mientras amenazaba con asesinarla, la introdujo a la bodega en donde estaban su hermano y su pareja.
Posteriormente, fueron trasladados a la entonces Procuraduría General de la República; en el camino, la pareja de Mónica murió frente a ella a causa de la tortura infligida. Sin decirle los cargos que pesaban sobre ellos, Mónica y su hermano fueron trasladados en avión a la Ciudad de México.
Mónica fue procesada por los delitos de Secuestro y Posesión de Armas de Uso Exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea en el Juzgado Primero de Distrito en la Laguna, Torreón.
El día 12 de marzo de 2020, el juez federal Yuri Alí Ronquillo Vélez reconoció la inocencia de Mónica Esparza y ordenó su libertad, sin embargo, la FGR presentó un recurso de apelación alegando que las pruebas obtenidas bajo tortura son válidas bajo “ciertas excepciones”.
El 26 de enero de 2021, el Primer Tribunal Unitario de Coahuila confirmó la sentencia absolutoria, reiterando el rechazo total a las pruebas derivadas de las graves violaciones a los derechos de Mónica.
La sentencia que absolvió a Mónica quedó firme el 12 de marzo de 2021.
