Familiares y todo México recordarán lo acontecido aquel fatídico 26 de septiembre de 2014, un grupo de estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa desaparecieron en Iguala, Guerrero lo que es considerado un “crimen de estado”.
Los hechos comenzaron luego de que los normalistas decidieran ir a una conmemoración de la masacre de Tlatelolco del 2 de octubre en Iguala, Guerrero, por lo cual decidieron recaudar fondos y tomar autobuses para asistir. Los estudiantes partierona las 9 de la noche en 2 grupos pero fueron interceptados por policías municipales de Iguala y otros agentes de seguridad. Estos hechos violentos dejaron un saldo de 43 desparecidos, 6 muertos y al menos 40 personas resultaron con heridas, además de cientos de víctimas directas e indirectas.
En 2015, la PGR dio la “verdad histórica” de los hechos. En ella se plasma la versión de que los estudiantes fueron entregados por el grupo criminal “Guerreros Unidos”, luego fueron supuestamente asesinados y quemados en un basurero de Cocula. Sin embargo, esta declaración fue criticada por los familiares y organismos de derechos humanos al haber pruebas que contradecían la versión.
Las esperanzas de conseguir justicia se hicieron presentes luego de la llegada del presidente López Obrador en 2018; prometió reabrir el caso y dar con la verdad, para eso se creó en 2019 la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia en el Caso Ayotzinapa y comenzaron las investigaciones.
No obstante, las pruebas encontradas no fueron suficientes para esclarecer el caso, además de que hasta la fecha no hay nadie condenado por este caso. Por lo que los familiares de las víctimas esperan que con el nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum se encuentre la verdad.
