Esta semana estalló de forma pública una polémica por el uso de programas sociales desde la Delegación del Bienestar en Coahuila, grupos afines a Luis Fernando Salazar acusaron al delegado de la oficina en la entidad, Américo Villarreal, de hacer mal uso de los recursos públicos y en favor de su posición política.
La primera en generar declaraciones al respecto fue la regidora de Morena en Saltillo, Alejandra Salazar, quien denunció públicamente a Villarreal por utilizar la delegación a su cargo de forma facciosa y en favor de su propia causa y la de su pareja sentimental, la senadora por Morena Cecilia Guadiana, a quien también acusó de violentarla en el pasado proceso electoral.
A las críticas en contra de los Villarreal-Guadiana se sumaron personajes como el propio Luis Fernando Salazar, la diputada federal Cintia Cuevas y ediles de Torreón como Zazil Pacheco.
Por su parte, durante la tarde del lunes respondieron a dichos señalamientos la propia Cecilia Guadiana y el diputado local Alberto Hurtado, quienes negaron las acusaciones de sus compañeros morenistas, además de llamarlos a la unidad y trabajar en favor de la población de Coahuila.
