Intolerante a la crítica y sin argumentos ante los señalamientos de corrupción en su gobierno, el alcalde de Torreón, Román Alberto Cepeda González, optó por un ataque directo a la libertad de expresión: La clausura de un anuncio espectacular de Horizonte Lagunero, medio perteneciente al Grupo Zócalo, sin explicación alguna.
Horizonte Lagunero, Grupo Zócalo y el periodista Luis Carlos Plata denunciaron irregularidades y casos de corrupción dentro del gobierno municipal. El más reciente: “Ganar perdiendo: el negocio de perder demandas millonarias en el Torreón de Román”, expone un esquema en el que el Simas podría enfrentar una indemnización de entre 160 y 270 millones de pesos a favor del empresario Juan José Fernández García.
La falta de acción legal por parte de Simas para defenderse en este proceso judicial deja claro la colusión para permitir la pérdida deliberada del caso, lo que podría constituir en prevaricación. La manera más descarada de corrupción: simular una defensa legal deficiente para beneficiar a particulares con recursos públicos. Así se las gastan en el ayuntamiento de “Robán”.
El de la idea…
Si algo faltara en el entramado que apesta a corrupción en el ayuntamiento de Torreón, el hijo de Juan José Fernández García, empresario a cargo de la demanda en contra del Municipio, Pablo Fernández Llamas, ocupa desde enero de 2025 el cargo de director de Inspección y Verificación en la administración de Román Alberto Cepeda.
La Dirección de Inspección y Verificación tiene a su cargo revisar el funcionamiento de los anuncios espectaculares, por lo que no se requiere de mucha intriga para saber quién sugirió a “Robán” la clausura del anuncio donde aparecían los conductores de noticias de Horizonte Lagunero.
La clausura del anuncio no solo representa un golpe a la libertad de expresión, también la intolerancia del gobierno municipal a la critica… Por cierto, hasta ahora, ninguno de los señalamientos de Grupo Zócalo y Horizonte Lagunero sobre los casos de corrupción en el gobierno local, fueron desmentidos.
A empujones
Mientras en Torreón sus inspectores municipales clausuraban un anuncio panorámico de Horizonte Lagunero, sin notificación, ni justificación legal, en Saltillo el alcalde Román Alberto Cepeda González estuvo en un evento oficial.
Allá también mostró su peor cara: se negó a responder cualquier señalamiento sobre los escándalos de corrupción en su gobierno –incluyendo el último, sobre el juicio que se está dejando perder el Simas, a cargo de Roberto Escalante González–, y en un arranque de intolerancia, aventó con el brazo a una reportera que sólo hacía su trabajo. La censura en Torreón y la agresión en Saltillo retratan al personaje: autoritario, incapaz de dar la cara y cada vez más aislado y enojón.
Blindaje total
En el marco de la firma del Pacto Coahuila 2025, el gobernador Manolo Jiménez Salinas mandó un mensaje claro: en Coahuila no hay espacio para candidaturas infiltradas por el crimen organizado, ni siquiera en un proceso tan convulso y delicado como la elección extraordinaria de jueces y magistrados.
Acompañado por representantes de los tres órdenes de gobierno, empresarios y líderes sindicales, Manolo subrayó que el blindaje institucional del Poder Judicial garantiza perfiles preparados, con trayectoria y sin vínculos con la delincuencia.
El mensaje va más allá de la coyuntura electoral: quien intente desestabilizar el modelo de seguridad, justicia y crecimiento económico en el estado, se topará con instituciones como el gobierno estatal, los ayuntamientos, organismos empresariales y sindicatos; la Fiscalía General y dependencias federales como la Guardia Nacional, Ejército y Marina.
