
Arabia Saudita.- La Selección de Australia no falló y disputará por séptima vez, la sexta de manera consecutiva, la fase final de una Copa del Mundo, tras certificar este martes su clasificación para el Mundial 2026 al imponerse por 1-2 a Arabia Saudita.
El mejor regalo posible para el portero Matt Ryan, exguardameta, entre otros, del Valencia y la Real Sociedad, que cumplió su partido número 100 con la camiseta de los Socceroos.
Un Ryan que pese a la insistencia de Salem Al Dawsari, el único del conjunto saudí que pareció creer en todo momento en lograr la victoria por 5 tantos de diferencia que necesitaba el local para arrebatar el pase mundialista a Australia, apenas tuvo que intervenir en la primera mitad.
Circunstancia que no impidió a los ‘halcones verdes’ adelantarse a los 19 minutos en el marcador con un gol del Abdulrahman Al Obud tras un pase, como no, de Al Dawsari, tras la enésima internada del jugador del Al Hilal por la banda izquierda.
Pero Australia, que en el pasado Mundial de Qatar 2022 alcanzó los Octavos de Final, en los que cayó por 2-1 ante Argentina, no estaba dispuesta a que nada ni nadie le apartase de su séptimo Mundial.
Tal y como dejó claro a falta de 3 minutos para la conclusión de la primera mitad con el gol del centrocampista Connor Metcalfe, que igualó la contienda 1-1 en una acción en la que el jugador del St. Pauli alemán demostró su capacidad de llegada al área rival.
Un gol en el que jugó un papel fundamental Mitch Duke, que en los minutos finales del primer período demostró su capacidad como asistente con el magnifico pase que sirvió a Metcalfe, en el arranque del segundo desveló sus condiciones como magnífico cabeceador.
El jugador del Machida Zelvia japonés le ganó la partida a los 48 minutos a todos y estableció el definitivo 1-2 para los oceánicos al culminar con un potente testarazo una falta lateral botada por Martin Boyle.
Todo un golpe para Arabia Saudita, que tres minutos más tarde pareció ver agravada todavía más su situación con la expulsión por tarjeta roja directa del lateral Ali Majrashi tras derribar a Boyle en un contraataque. Una roja de la que finalmente se salvó el defensor luego de la revisión de las imágenes del árbitro, donde se ve que Majrashi no había cometido falta sobre el jugador visitante.
Nada pudo impedir, sin embargo, la victoria del equipo australiano, pese a que Arabia Saudita dispuso a los 85 minutos de una inmejorable ocasión de lograr el empate en un lanzamiento de penalti.
Pero Salem Al Dawsari no pudo transformar la pena máxima que él mismo había provocado, tras toparse con un espectacular Matt Ryan que adivinó las intenciones del jugador saudita y detuvo el balón.
Pese a la derrota, Arabia Saudita podrá seguir soñando con la clasificación tras asegurarse su presencia en la cuarta ronda de las eliminatorias asiáticas para el Mundial 2026.
Una ronda en la que los 6 equipos participantes se dividirán en 2 grupos de 3 equipos cada uno, y el primer clasificado de cada sector obtendrá el boleto directo, mientras que los segundos se jugarán su presencia en la Copa del Mundo en la repesca internacional.